¡Hola a todos!

Les cuento que el fin de semana tuve la oportunidad de ir a un baby shower de la hija de una amiga muy cercana. ¡Fue una experiencia maravillosa!

La familia de la futura mamá le organizó un evento muy bonito en el jardín de la casa de mi amiga, donde asistieron familiares y las amigas más cercanas. La temática fue de estrellitas, basado en la canción de cuna que acá se llama “Twinkle, Twinkle, Litte Star”. En español es conocida como “Estrellita Dónde Estás”, ¿la han escuchado? La cuestión es que ese jardín estaba decorado con bombas (globos) de estrellas y lunas, los manteles, los vasos y los platos, todo tenía estrellas doradas. Mi amiga hizo un hermoso trabajo decorando todo. Incluso tenían ¡cupcakes decorados con estrellas! Todo lucía precioso, pero lo más lindo de ver fue la felicidad de la futura mamá. Estaba radiante, y su esposo la acompañaba con una sonrisa de oreja a oreja. Además, se nota que pasaron un buen rato y se divirtieron, que era lo importante.

Ir a este evento me trajo muchas memorias de mis propios embarazos. Para los que no lo saben, ¡yo me casé muy joven! Héctor y yo nos llevamos varios años, y aunque él estaba ya en edad de casarse, para muchas personas, el hecho de que yo me casara con 18 años ¡era una locura! A veces cuando reflexiono sobre esto, concuerdo con que, para los estándares de la sociedad, yo estaba muy joven, pero no cambiaría nada en absoluto. Me encantó casarme joven, porque me dio la oportunidad de comenzar a tener mis hijos más joven y disfrutarlos más. Al par de años de casados, llegó mi primera hija, Laura, y los otros dos no tardaron a unirse a nuestra familia.

Este tiempo fue una experiencia increíble. Todos mis hijos se llevaban relativamente poca diferencia de edad, entonces se tenían uno al otro para jugar y hacerse compañía. Recuerdo que algunos días eran más difíciles que otros, imagínense, ¡mis dos primeros se llevan sólo un año de diferencia! Pero el hecho de que fueran tan amigos y de que yo estuviera lo suficientemente joven y con energía, ayudó mucho. Además, Héctor fue siempre un excelente compañero y un padre increíble, así que en eso fui bendecida ya que facilitó mucho las cosas.

Definitivamente, el ser mamá es una bendición que no la cambio por nada, y amé cada momento del crecimiento de mis hijos. Hoy en día, que todos están mayores, ya en la universidad o graduados, la maternidad la vivo también de otra manera, y es igualmente muy disfrutable. Mis momentos preferidos son aquellos en los que estamos todos reunidos, conversando, paseando, comiendo, o disfrutando de la compañía mutua.

Hoy me gustaría enfocar este post a las futuras mamás, y a las que acaban de tener a sus bebés. Ya sea que es su primogénito o primogénita, o que ya sean mamás y estén recibiendo un nuevo angelito en sus vidas, espero que les sea útil. Muchas mamás que llegan a nuestras tiendas de Forma Tu Cuerpo, buscan fajas que las ayuden en este nuevo proceso que comienzan a vivir, pero varias no tienen claro qué es lo que deben tener en cuenta al momento de comprar su faja. Así que hoy estaré enfocando la información en contarles qué tipo de fajas les sirve para después del parto y cómo elegir la mejor para cada una de ustedes.

Mamitas, les cuento que en el período en el que tuve a mis hijos, no sabía nada sobre fajas, y ahora que sé mucho más, me doy cuenta de que usar faja hubiese sido la solución de muchos de mis inconvenientes durante el proceso de post parto. Mi respuesta para ustedes es que sí se puede usar faja después del embarazo, y en muchos casos ¡es muy recomendado!

Por supuesto, debemos tener en cuenta que cada una de nosotras es diferente, y que cada embarazo y proceso de post parto debe ir acompañado de un cercano monitoreo médico. Su médico o médica será la persona con la que deben sentirse cómodas y aclarar todas las dudas que tengan. Obviamente, también deben conocerse a ustedes mismas y escuchar su cuerpo, ya que el autocuidado será indispensable durante esta etapa de sus vidas.

Las que ya han pasado por esto, tendrán más idea de lo que hablo, pero las que están teniendo sus bebés por primera vez deben saber que estarán atravesando muchos cambios con sus cuerpos y sus emociones. Los médicos generalmente recomiendan que los primeros días después del parto, busques descansar y recuperarte lo más posible. Debemos dedicar nuestra energía en nosotras mismas y en conocer a nuestro hijo o hija, y en nuestra recuperación tanto física como emocional. Los primeros días serán de muchas emociones, y tenemos que buscar un equilibrio. No nos estresemos con las condiciones del hogar, o las tareas que “deberíamos estar haciendo”. Busquemos nuestro propio ritmo, tengámonos paciencia y pidamos siempre ayuda a nuestra pareja o seres queridos.

Como les comentaba anteriormente, el uso de una faja durante el proceso de postparto les será útil para esta recuperación física. Forma Tu Cuerpo tiene una sección de fajas especiales para post parto, que son muy útiles ya que se adaptan a las necesidades que tenemos como nuevas mamás y buscarán acompañarnos en este proceso de recuperación. Por supuesto, siempre tengan en cuenta consultar con su médico al respecto de en qué momento pueden comenzar a usar sus fajas.

Cuando tenemos a nuestros bebes, nuestros cuerpos pasan por muchos cambios físicos. Ya no serán los mismos que antes del embarazo inmediatamente (a veces incluso ya no serán los mismos, punto), pero esto es totalmente normal y no debemos asustarnos al respecto. Mujeres, ¡traer niños al mundo es una experiencia increíble y única de nuestro sexo!

Durante el periodo postparto, nuestros cuerpos necesitaran más cuidados que nunca, debemos darles tiempo para que vayan recuperándose de una forma progresiva. Los doctores recomiendan que no nos obsesionemos con buscar la talla que teníamos antes, sino que vayamos trabajando poco a poco en nuestra mejor versión de ¡esta nueva versión! Eso significara que quizás nos tome un tiempo el perder los kilos que nos sobren. Los expertos explican que después del parto, suelen perderse de cinco a siete kilos, ya que perdemos el peso del bebé, la placenta y líquido amniótico que llevamos por nueve meses. Luego queda perder el peso que ganamos durante el embarazo.

Los períodos post parto son períodos de recuperación, tal como cuando tenemos cirugías o cualquier tipo de intervención médica. Así como recomiendan usar faja para las recuperaciones de cirugías, también se recomienda el uso de faja para post parto.

Las fajas comprimirán todo el abdomen, el abdomen alto, medio y bajo, además de trabajar los glúteos. Esta compresión también ayudará a que vayas eliminando los líquidos que estabas reteniendo durante este período. La compresión junto con la estructura de la faja te ayudará a mantener una correcta posición, más aún cuando estés amamantando a tu bebé. Las fajas serán útiles tanto para luego de un parto normal o luego de una cesárea, ya que facilitarán que la piel comience a adherirse nuevamente al músculo.

En Forma tu Cuerpo tenemos una línea entera destinada al uso durante el período post parto.

Lo ideal sería que fueras a tu tienda Forma Tu Cuerpo más cercana, o te asesoraras con una vendedora por internet, luego de tu primer control post parto, más o menos a los ocho días del parto. En caso de que hayas pasado por una cesárea, lo recomendable es que comiences a buscar tu faja ideal luego de que te retiren los puntos.

La variedad de modelos se debe básicamente a la variedad de mujeres que hay. El hecho de que haya diferentes opciones nos ayuda a que encontremos la faja que más se adapte a nuestras necesidades y situación personal. Sin embargo, hay un par de fajas que siempre recomendamos muchos debido a sus cualidades: la Faja Rodilla Tira Ancha Negra, la Faja Media Pierna con tiras Negra, la Faja Media Pierna Tira Ancha y la Faja Rodilla con Mangas Gafete Central.

Estas fajas son ideales porque, como mencionaba antes, controlan todo nuestro abdomen, e incluyen corrector de postura debido a su material y compresión. Todos estos modelos incluyen doble refuerzo abdominal, costuras planas que ayudan a una mayor comodidad, están diseñadas para definir nuestra cintura, tiene un sistema levanta cola e incluyen broches inferiores, para que puedas ir al baño con total comodidad. Otra particularidad de estos modelos es que dejan libre la zona de nuestros pechos, una característica que se le conoce como “senos libres”. Esto nos facilita muchísimo la capacidad de amamantar en cualquier momento del día, ya que simplemente debemos retirar el sostén, sin necesidad de quitarnos ninguna parte de nuestra faja para dar de comer a nuestro bebé.  Respecto al amamantamiento de nuestro hijo o hija, la faja nos ayudará a mantener una correcta postura al momento de alimentarlo.

La Faja Media Pierna Tira Ancha, la Faja Rodilla con Mangas Gafete Central y

la Faja Rodilla Tira Ancha, cuentan con mayor cubrimiento de brazos y espalda, factores que colaboran a la buena postura, y por supuesto, a deshacerse de los rollitos de nuestra espalda y a controlar mejor la piel de nuestros brazos. Por su parte, la Faja Media Pierna con Tiras Negra, controlará los rollitos que se

pueden crear en la zona del brasier, y su encaje elástico no es solo lindo, sino que está elaborado de tal manera que no se sube y no se nota en la ropa que usemos.

Una de las preguntas que las mamás nos hacen es, ¿cómo hacemos cuando ya empezamos a disminuir nuestras medidas?, y es que a medida que las semanas van pasando, y cuando comenzamos a perder esos kilos de más que ganamos durante el embarazo, es probable que comencemos también a cambiar nuestras medidas. Mi respuesta para las mamitas con esta pregunta es: “no te preocupes que ¡tiene solución!” Si cuando tengas a tu bebé te decides por una Faja Rodilla con Mangas Gafete Central,

esta faja funciona justamente con broches. Verás que incluye tres hileras de broches, por lo que puedes empezar ajustando la faja en la primera hilera en las primeras semanas, y luego ir cerrándola en la segunda y tercera hilera a medida que vayas acercando a tu peso deseado. Además, tanto este tipo de faja como las otras que les recomendé antes, todas tienen la posibilidad de ser modificadas en nuestra Clínica de Fajas, donde las adaptaremos a tus nuevas medidas y necesidades.  

Al momento que elijas tu faja, lo ideal es que lo uses durante todo el día, y te la quites para dormir. El usarla diario te ayudará a veas cambios más rápidamente respecto a la retención de líquidos y durante tu proceso de recuperación. Otra recomendación que siempre les doy a las mamás es que, a pesar de que las fajas que les recomendé tienen la ventaja de venir con un empaque ideal para hielo terapia, no realicen este proceso hasta luego de un tiempo, porque puede traerle cólicos a nuestro bebito. Ve consultando siempre con tu doctor de cabecera y prueba qué funciona mejor para ti y tu hijito.

Por último, pero no menos importante, mi mensaje para ti, mamá, es el siguiente:

Recuerda que siempre debes ser paciente durante todo este proceso y disfrutarlo, ya que el momento en que tenemos a nuestro bebé por primera vez, y el tiempo en el que vamos acostumbrándonos los dos a nuestra nueva vida, son etapas únicas y memorables. Disfrutemos cada momento y cada etapa de la niñez de nuestros hijos, ya que ¡ser madre es algo maravilloso!

Espero lo disfruten

Con cariño,

Rocío